domingo, 16 de mayo de 2010

ANEMIA

TIPOS DE ANEMIA


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Generalidades : Antes de evaluar los diferentes tipos de anemia, primero hay que destacar que la etimología de anemia es griega (an=privación, haima=sangre) y se reconoce como tal cuando la concentración de hemoglobina sanguínea disminuye por debajo de los niveles reconocidos por la Organización Mundial de la Salud, en 13 gr/dl para hombres y menos de 12 gr/dl para mujeres, 11 gr/dl para embarazadas y niños entre 6 meses y 6 años. Cualquier condición pasible de comprometer la producción de aumentar la tasa de destrucción o pérdida de glóbulos rojos puede ocasionar anemia. También si la médula ósea no consigue compensar la pérdida de eritrocitos, como también un aumento de las necesidades de hierro como ocurre en niños durante el período de crecimiento o en mujeres durante su embarazo. Según el enfoque que se realice pueden existir varios tipos de anemia: si se utiliza la rapidez en que se produce se las agrupa en agudas y crónicas; si se las clasifica de acuerdo a su pronóstico, se las divide en moderadas y severas.
Clasificación de tipos de anemia de acuerdo a la forma de aparición:


ANEMIA AGUDA Y CRONICA


a) ANEMIA AGUDA: Se produce por pérdida súbita de sangre y la falta de volumen en el sistema circulatorio, con disminución de la concentración de hemoglobina. La falta del 10% del volumen sanguíneo, como ocurre en una extracción de sangre normal en una donación, es bien tolerada por el organismo. Las pérdidas entre el 10% y el 20% de la volemia, causan disminución de la presión arterial, mareos y hasta desmayos (lipotimia). Cuando las pérdidas superan el 20% del volumen total, además hay taquicardia, frialdad de las extremidades, palidez de la piel, agravamiento de la hipotensión. Dentro de este tipo de anemia, cuando se llega a esta situación es existe riesgo de de shock hemorrágico. Se presume que hay shock porque además de la palidez y frialdad de la piel, hay sudoración intensa, obnubilación y pérdida del conocimiento. Si no se trata la pérdida de sangre, éste evoluciona al coma y posiblemente a la muerte.


b) ANEMIA CRÓNICA: En este tipo de anemias, el volumen sanguíneo no disminuye, porque como el proceso es lento, permite que sea compensado por un aumento del volumen plasmático (que forma parte del volumen sanguíneo total). La falta de hemoglobina, generalmente es acompañada por una disminución de los glóbulos rojos, que la transportan. Esta falta es la que causan los síntomas de la anemia crónica: palidez de la piel, falta de oxígeno en los órganos y decaimiento, es decir un cuadro clínico que Hipócrates (400 A de C) describiera magistralmente: “ la palidez y la debilidad se deben a la corrupción de la sangre”. La disminución crónica del oxígeno afectan principalmente al sistema nervioso central, al corazón y en general a la masa muscular, ya que son tejidos que demandan más oxígeno para sus funciones habituales. Por ello, si hubiera un aumento en la actividad física de una persona con anemia crónica, estos síntomas se van acentuando, porque hay más demanda de oxígeno. Con una concentración de hemoglobina en sangre entre 9 y 11 gr/dl puede haber irritabilidad, dolores de cabeza y agotamiento psicofísico. En las personas de edad, además puede haber cansancio extremo y dolores precordiales (falta de oxígeno en el miocardio). En pacientes que tienen una concentración de hemoglobina entre 6 y 9 gr/dl este tipo de anemia provoca taquicardia, falta de aire al respirar (disnea), al realizar los esfuerzos mínimos. Las personas que se hallan en una concentración inferior a 6 gr/dl. los síntomas y signos se observan hasta en momentos de reposo.
Existe otra clasificación que divide en 2 grupos a los tipos de anemia según su gravedad: la anemia moderada y la anemia grave.


ANEMIA MODERADA Y GRAVE


a) ANEMIA MODERADA: Son las anemias que tienen una concentración de hemoglobina entre 9 y 11 gr/dl y que suelen acompañar a muchas enfermedades crónicas de más de un mes de duración. Las causas más frecuentes son inflamación crónica, cáncer y hepatopatías. En estas hay signos propios de la anemia moderada, el hematocrito es mayor al 25%, el hierro plasmático y la concentración de hemoglobina están disminuidos. También suelen acompañar a procesos gastrointestinales crónicos que cursan con pérdida de sangre, como gastritis y hemorroides, entre otros.


b) ANEMIA GRAVE: El 50% de pacientes sufrirá en algún momento de la evolución de su enfermedad una anemia grave. Este tipo de anemias acompañan a un estado grave de la enfermedad que cursa la persona (cáncer, aplasia medular, pérdida de sangre aguda con o sin shock hipovolémico, entre otros). El hematocrito es inferior al 20% y el descenso de la concentración de hemoglobina es inferior a 6 gr/dl, situación que compromete altamente la salud y la vida, ya que puede dañar irremediablemente los signos vitales.

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